Un toque acogedor y especial

La anfitriona es una maravilla, siempre atenta y dispuesta a ayudar. La decoración del lugar tiene un encanto único que hace la estancia más placentera.

Las habitaciones son algo pequeñas y quizás no muy insonorizadas, lo que puede ser un inconveniente para quienes buscan un descanso absoluto.

La estadía fue interesante. La ubicación estaba bien y fue fácil moverse. Recuerdo que los escalones parecían never-ending, pero el lugar tenía un ambiente tranquilo. No tuve problemas con la limpieza, aunque las puertas hacían un poco de ruido. Me sentí bastante cómodo, pero lo mejor fue el trato amigable de la anfitriona, que estaba siempre dispuesta a ayudar y hacer que me sintiera bien. Eso lo hace especial.

Faltaba un poco de mantenimiento en algunos detalles. Las ventanas no cerraban bien y el ruido era un poco molesto a veces. Además, no había ascensor y eso puede ser complicado si uno tiene problemas de movilidad.

La ubicación está muy cerca del centro. Es fácil moverse y explorar Valladolid a pie.

La experiencia estuvo marcada por el trato desagradable de la anfitriona. Su actitud fue muy defensiva y poco profesional desde el inicio. Además, la falta de mantenimiento en las instalaciones y el ruido proveniente de las escaleras hicieron la estancia incómoda.

excelente acceso a lugares emblemáticos y parques bellos

Mi estancia fue increíble, ya que estaba a menos de 5 minutos a pie de la Plaza Mayor y muy cerca del hermoso Campo Grande, lo que hizo que mis paseos por Valladolid fueran aún más agradables y cómodos. además, la anfitriona fue muy atenta, siempre dispuesta a ayudar y a asegurarme que tuviera una gran experiencia.

La ubicación es ideal, a pocos minutos de la Plaza Mayor, lo que facilita explorar Valladolid a pie.

Las escaleras son bastante empinadas y puede ser complicado subir el equipaje, especialmente después de un día largo.

La habitación tiene un balcón que, aunque antiguo, ofrece una vista interesante. La decoración tiene un toque peculiar que hace que el ambiente sea más acogedor, invitando a relajarse después de un día explorando la ciudad.

La falta de ventanas en una habitación puede ser un verdadero problema, ya que no hay ventilación natural. La acústica es deficiente, permitiendo que los ruidos de las obras y del tráfico se cuelen, afectando el descanso. Además, las escaleras son empinadas y pueden ser un desafío tras un largo día, especialmente si llevas equipaje. La limpieza dejó un poco que desear, ya que había manchas en las paredes que no se habían atendido antes de mi llegada.

la verdad es que me esperaba algo espectacular, pero las ventanas antiguas dejaban pasar todos los ruidos, impidiéndome dormir. además, la actitud de la responsable fue decepcionante, me echó la culpa de una mala reserva. una pequeña atención como un upgrade o un detalle habrían hecho toda la diferencia, pensé en un buen review pero no pude.

Encantador refugio, ideal si buscas un ambiente acogedor con una decoración única que te hará sentir como en casa.

La cocina estaba bien equipada y la decoración era encantadora. La presión del agua en la ducha no era buena.

Estancia agradable en un ambiente acogedor. La anfitriona muy atenta, siempre dispuesta a ayudar. La cocina bien equipada, ideal para preparar comidas. Sin embargo, escaleras empinadas y un poco de ruido en las puertas. En general, una buena opción para disfrutar en Valladolid.

La ubicación es excelente y la cama muy cómoda, lo que contribuye a un buen descanso. Sin embargo, la falta de mantenimiento se nota, con enchufes mal situados, lo que hace que sea difícil cargar dispositivos. Aunque la anfitriona es servicial, el ambiente general del lugar no cumple con las expectativas por el mal estado en que se encuentra.

Este lugar me queda perfecto y tiene todo lo que necesito, wi-fi, sala de ocio, check-in exprés y un ambiente acogedor. En mi primera estancia, el personal me ayudó a encontrar algo que perdí, lo cual siempre recordaré. Siempre es un placer regresar.

Puedo recomendar este hotel a todos for una breve estancia de fin de semana,

Acogedora habitación, cómoda cama, la anfitriona es muy atenta y se preocupa por los detalles, siempre lista para ayudar y aconsejar sobre la ciudad, además el acceso a wifi fue excelente, lo que hizo que mi estancia fuera aún mejor.

Nada, todo excelente.